Crisis en el sector textil por caída de ventas y empleo

El último relevamiento de la Fundación Pro-Tejer muestra que el sector textil e indumentaria atraviesa una profunda contracción. Cinco de cada diez empresas registraron caídas en ventas en el segundo trimestre de 2025, con un promedio del 7%, mientras que en comparación con 2023 la caída asciende al 28%. La producción acompañó la tendencia: la mitad redujo su nivel productivo y ocho de cada diez empresas presentan descensos frente a 2023.
El impacto sobre el empleo es significativo: 72% de las compañías canceló horas extras, cerró turnos o despidió trabajadores, y seis de cada diez redujeron su plantilla desde fines de 2023 hasta junio de 2025. Además, 7,5 de cada diez firmas no realizaron inversiones en maquinaria ni ampliaron capacidad productiva durante 2024, y ocho de cada diez no prevén hacerlo este año.
La debilidad se vincula con la caída del consumo interno, la presión de importaciones y la ausencia de políticas industriales que respalden a las pymes. Plataformas chinas como Shein y Temu impulsan un aluvión importador: los productos textiles importados crecieron 97% en volumen en los primeros siete meses de 2025, y la indumentaria 123% interanual.
El presidente de la CAA, Carlos Almiroty, señaló que la calidad del algodón local afectó la producción, mientras que las importaciones de productos terminados a bajo precio presionan sobre la industria nacional. Ante este panorama, Pro-Tejer plantea la necesidad de reforma tributaria federal, control de competencia desleal y políticas de fomento al consumo interno para recuperar la actividad.